Un equipo de efectivos del Consorcio de Tenerife ha participado en un curso especializado en la extinción de incendios a bordo de buques con el fin de actuar ante posibles emergencias en casos de incendios, rescate y de lucha contra la contaminación marina.

 

La formación técnica, que se ha llevado a cabo por personal de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, ha estado dirigida a los efectivos que presten servicios en parques de las ciudades portuarias y que pueden verse involucrados y deban actuar en incendios a bordo de buques.

 

En este sentido, esta acción va a permitir que los efectivos conozcan y se familiaricen con estrategias y tácticas sólo aplicables en los buques por su compleja distribución interior, por los distintos tipos de carga o pasaje que transportan siempre sometidos a variables en su estabilidad. También les han explicado los accesos del Puerto, la división en dársenas, zonas de operaciones y mercancías y sus respectivos riesgos.

 

Asimismo, se busca ampliar los conocimientos relacionados con la supervivencia en el mar, como por ejemplo las acciones que han de ser tomadas en los botes de rescate, técnicas en el entorno marítimo, organización de la tripulación, recursos especiales, o sistemas de extinción en bodegas, máquinas o en cubiertas, entre otros.

 

 

 

 

Efectivos del Consorcio Insular de Bomberos, con base en el parque de San Miguel de Abona, fueron requeridos este domingo para participar en el rescate de una persona que sufrió una caída en Montaña Pelada, El Médano.

El servicio fue solicitado por un alertante accidental a través del CECOES, que informó de que una joven se encontraba mareada, tras haber sufrido una caída, por lo que no podía continuar por sus propios medios.

Por este motivo, los efectivos se desplazaron hasta el lugar y tras localizar a la afectada, fue trasladada hasta la zona donde se encontraban los recursos sanitarios. 

 

Bomberos con base en el parque de la capital tinerfeña intervinieron en la extinción de un incendio en una pensión en la calle San Martín, en la capital tinerfeña. El fuego se originó en una lavadora y una secadora ubicadas en el ático del inmueble. Los bomberos procedieron a su extinción y posterior ventilación.